El paseo de Ingeniero Sáenz de Miera es la ruta de entrada más corta entre la LE-30 y el casco urbano de la ciudad. Es decir, este viario es y en un futuro será, el principal nexo de comunicación entre la urbe y el resto de viarios interurbanos.
Su conexión con la LE-30, permitirá la entrada a la ciudad desde N-120 Camino de Santiago, AP-71, A-6, AP-66 Ruta de la Plata y A-60. La vía de penetración, LE-11, paralela al río Bernesga y Sáenz de Miera, dará entrada a todo este tráfico; es decir, salvo la N-630, en su variante por puerto Pajares, cualquier vehículo procedente de cualquier lugar de la provincia obtendrá una vía de entrada rápida y sin detenciones hasta la zona central de la ciudad por la avenida Palencia a través del paseo de Ingeniero Sáenz de Miera. En 2019, ya se ha comprobado que esto no está demasiado cerca de la realidad, ya que el tráfico urbano, accede de un modo más numeroso, por la calle los Aluches, y la avenida Europa para los vehículos que acceden por la mencionada N-630, bien como origen, bien como colector de la LE-30. Sin embargo, la modificación sigue siendo necesaria para una correcta comunicación del corredor interior oeste. Si bien el paseo de Ingeniero Sáenz de Miera puede soportar las intensidades y volúmenes de tráfico previstos, la conexión con el casco urbano se realiza en pésimas condiciones. Hacia el norte no existe, en la actualidad, posibilidad de continuidad física del trayecto, salvo por una calle terciaria (Ana Mogas). Tanto la estructura de la intersección de la avenida Palencia como la barrera arquitectónica del histórico puente de San Marcos sobre el río Bernesga en el paseo de Salamanca, suponen un cuello de botella que recibe el tráfico de entrada a la ciudad sin posibilidad de ofrecerle alternativa válida para su destino. |
Hacia el este y centro de la ciudad, el reducido giro y el ya sobredimensionado puente de la avenida Palencia, impiden la correcta fluidez del tráfico hacia la glorieta de Guzmán. De hecho, esta intersección, ya manifiesta grados de saturación altos o muy altos e incluso bloqueos completos.
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(2003) El objetivo planteado no es establecer la zona de la avenida Palencia como un eje fundamental en el tráfico Norte –> Sur –> Norte, sino planificar una reordenación que permita la filtración de este volumen de tráfico, tanto en su entrada a la ciudad como en su salida, sin que se produzca un embudo en la intensidad media del tráfico. Para ello se propone:
Dada la imposibilidad de establecer un giro más amplio en la salida del paseo de Ingeniero Sáenz de Miera con avenida Palencia, salvo que se construya un nuevo puente sobre el río Bernesga que mejorase y ampliase el radio de giro, la opción más aconsejable consiste en desviar el tráfico de entrada al paseo Ingeniero Sáenz de Miera desde la avenida Palencia por la calle Sancho el Gordo, permitiendo al movimiento de salida, desplazarse a su izquierda en el sentido de la marcha para ampliar el giro necesario para acceder a la glorieta de Guzmán el bueno por la avenida Palencia. |
El modelo proyectado permite mejorar las siguientes acciones:
Hacia el este y centro de la ciudad, el reducido giro y el ya muy dimensionado puente de la avenida Palencia, impiden la correcta fluidez del tráfico hacia la glorieta de Guzmán. De hecho, esta intersección, ya manifiesta grados de saturación altos o muy altos e incluso bloqueos completos. Dicho giro, además mejora en la propia avenida Palencia, al eliminar el actual carril de giro sobre el puente y utilizar dicha superficie para el movimiento tratado, lo que en la práctica incrementa de dos a tres carriles reales la capacidad de la avenida en sentido oeste – este. |
Es factible la conexión entre la calle Sancho el Gordo y el paseo Ingeniero Saenz de Miera por las calles Conde de Saldaña, Raimundo Peñafort o San Cristóbal.
Se establece la calle San Cristóbal como la más conveniente de acuerdo a los siguientes criterios:
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Entrada a calle Sancho el Gordo desde avenida Palencia. Este tráfico será uno de los más importantes de la ciudad al unirse los ejes Norte – Sur y Este – Oeste en esta intersección. En cambio el tráfico procedente de la calle Astorga hacia la glorieta de Guzmán será escaso, ya que este movimiento servirá únicamente de servidumbre a la estación de ferrocarril (la calle Astorga es de único sentido dirección El Crucero, amortizando dicho movimiento por la calle Antonio Nebrija.
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Salida del tráfico del paseo de Ingeniero Sáenz de Miera en todas direcciones. Este movimiento y debido a la comunicación directa de este vial con el paseo de Salamanca permitirá la eliminación de su ruta de la glorieta de Guzmán para todos aquellos vehículos que transiten en sentido Norte.
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Salida del paseo de Salamanca, tanto hacia el centro de la ciudad como hacia la ronda exterior de León.
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En un artículo de la prensa local (2022), se propuso por parte de un grupo político la adopción de una rotonda en la zona al objeto de mejorar la fluidez de la zona.
El razonamiento siempre es el mismo, la creencia de estas últimas tres décadas sobre la adopción de una glorieta como método universal para todos los problemas del urbanismo y de cualquier escenario de la movilidad. Sobre esta corriente de opinión, que tan en boga estuvo desde principios de este milenio, y de la que está escrita una opinión y un desarrollo que puede leerse aquí. |